La Puerta de Brandenburgo acompaña hoy estos Roscos de Semana Santa que tanto me gustan y que repito y repito sea cual sea la época del año. Primero nos vamos a dar un paseo por la capital alemana para continuar después con la receta. ¿Viajamos?
Lo primero que hice al llegar a Berlín fue acercarme a conocer la puerta de Brandenburgo, el monumento más visitado de la ciudad y que tanto nos dice de su historia.
La Puerta de Brandenburgo o Brandenburger Tor, es una antigua puerta de entrada a Berlín, y es sin duda una visita obligada para conocer los entresijos de la ciudad y su historia. Era uno de los accesos principales y daba paso a la parte nueva de la capital. Está situada en el centro actual de la ciudad, en la Plaza de París (Pariser Platz), al final de la avenida Unter den Linden, una de las más importantes y señoriales, y justo a sus pies está el Tiergarten, un precioso e inmenso parque que no me esperaba y me encantó, muy cerquita del Reichstag o Parlamento, donde reina la famosa cúpula al que os llevaré otro día.
Cuando se terminó el monumento, fue coronado con una cuádriga de cobre que representa a la Diosa de la Victoria en un carro tirado por cuatro caballos. Napoleón decidió llevársela a París como símbolo de la derrota alemana en 1806, pero cuando Napoleón fue derrocado, la cuádriga volvió a Berlín para devolverla a la Puerta de Brandenburgo, y se le añadió la cruz de hierro y un águila.
Luego, durante la Segunda Guerra Mundial, la puerta fue casi totalmente destruida, pero como se conservaban los moldes originales, se volvió a construir, esta vez sin águila ni cruz por considerarse vestigios del régimen Nazi. Cuando en 1961 se levanta el muro de Berlín, la puerta queda en tierra de nadie, y no se podía ser visitada por ninguno de los dos lados. Tan solo guardias y autoridades de la RDA tenía acceso a ella.
En 1991 cuando cae el muro, la puerta se restaura, y al hacerlo se le devuelven la cruz y el águila. Así es como la vemos y luce ahora
Aunque la puerta tiene cinco entradas, desde su construcción hasta el año 1918, el paso central de la puerta sólo podía ser utilizado por miembros de la familia real y algunos pocos afortunados.
No importa a qué hora vayas a visitarla, siempre está llena de gente haciéndose fotos y admirando su historia. Es el epicentro turístico de Berlín, y símbolo inequívoco de la caída del muro que dividía la ciudad. Por la noche queda iluminada, resaltando aún más si cabe. Merece la pena la visita.
Pero la gran sorpresa fue el Tiergarten, el inmenso parque que empieza a los pies de la Puerta de Brandenburgo y donde podréis disfrutar de un fantástico paseo, de los pájaros, y de un precioso zoo en la esquina opuesta. En sus orígenes fue un coto de caza, y no me extraña porque es enorme, pero ahora es un parque integrado en la ciudad que hace de pulmón de los berlineses y que usan para divertirse
Y ahora nos vamos a por esos Roscos de Semana Santa que tanto gustan en casa. Yo les pongo un extra de naranja porque me encanta el aroma que tienen, y añado un poco de anís para dar un toque dulzón de sabor que me encanta. Son muy fáciles y disfrutarás mucho con los niños, así que vamos a por ellos, que ya se oyen los tambores de las bandas de música ¡Ya está aquí la Semana Santa!
Ingredientes
- 580 gr de harina
- 150 g de azúcar
- 3 huevos
- 65 ml aceite de oliva virgen extra
- 70 ml de leche entera
- 1 sobre (16 gr.) de levadura tipo Royal
- 1/2 cucharadita de bicarbonato sódico
- Ralladura de dos naranjas y la piel de medio limón
- 25 ml de anís dulce
Para terminar los roscos:
- Aceite de oliva suave para freír las rosquillas
- la corteza de un limón
- Para el almíbar: 250 g de azúcar, 400 ml de agua, la piel de medio limón y 50 ml de zumo de limón.
- azúcar para rebozar
Preparación
1. En un bol, mezclar la harina con la levadura y el bicarbonato y reservar. Rallar la piel de las naranjas y reservar.
2. Batir los huevos con el azúcar hasta que doblen su volumen y estén esponjosos. Yo lo hice en una batidora eléctrica por comodidad pero podéis hacerlo a mano si lo preferís. Añadir entonces la leche, el anís, y las ralladuras de naranja y batimos bien hasta que la mezcla sea uniforme.
3. Añadir el aceite y cuando esté bien mezclado añadimos poco a poco la mezcla de harina y amasamos a manos o con batidora eléctrica (no con varillas), hasta que se forme una masa uniforme y pegajosa pero que se pueda trabajar. Nos ponemos un poco de aceite en las manos y formamos una bola que dejaremos reposar un par de horas envuelta en papel film.
4. En un cazo, poner a hervir el agua, azúcar y la piel y zumo de limón hasta que hierva y el azúcar esté disuelto. Reservar.
5. Poner a calentar el aceite con la piel de medio limón a fuego medio. Mientras que el aceite se calienta, formar bolas todas iguales (del tamaño de una pelota de ping-pong) siempre teniendo las manos untadas con aceite para que sea más fácil. Aplastamos la bola y hacemos un agujero en el centro con ayuda de un dedo.
5. Preparar un plato con papel absorbente. Freír las rosquillas por ambos lados hasta que estén bien doradas y pasar al papel absorbente
6. Con ayuda de una espumadera pasar las rosquillas por almíbar y colocar sobre una rejilla para que suelten el almíbar sobrante.
7. Finalmente pasar las rosquillas por azúcar y ¡Feliz y dulce Semana Santa!
Trucos y consejos
- Podemos sustituir el anís por vino dulce si lo preferimos, aunque el anís le da un sabor fantástico
- Añade un poco de canela al azúcar para añadir más sabor
- Dificultad: media
- Tiempo de preparación: 30 minutos más tiempo de reposo (1 hora)
- Raciones: unas 30 rosquillas
Hola Loleta!!!
que fantastica receta tradicional ,me encanto.
Hoy nos vamos con mi familia para despejarnos un poco al aire libre y cenaremos en el Cerro de Los Angeles ,lugar que queda a escasos 3 kilometros de mi casa, en Getafe Centro. Esta en un cerro testigo a mas de 600 metros sobre el nivel del mar y es el centro de la península Ibèrica, desde el cristo se aprecia la vista de todo Getafe , Madrid y mucho màs, el Pirulìn ,las Torres kio y las cuatro torres ,1 de cristal 2 repsol y etc. Este lugar guarda tambien parte de la gerra civil española .
bueno voy a hacer las rosquillas como ya hice tu ensalada pero no saque fotos al final .bss Loleta y gracias por la receta.
Hola Elena, ¡pues qué suerte tienes de vivir en un sitio tan increíble! Madrid es precioso y sin duda una de mis ciudades favoritas. Fui muy feliz mientras viví allí y allí tengo amigos para toda la vida. Ya me contarás de las rosquillas. Un abrazo y gracias por estar por aquí conmigo
Me encanta el post!! por las fotos, como siempre estupenda, pero tb por las de Berlín que me ha echo rememorar cuando fui hace unos años. Bonita ciudad,pero la comida.. a mi no me fue mucho eh? Estas rosquillas me encantan, pero ahora que tengo que controlar el ázucar ya no puedo comerlas.. crees que quedarían bien con stevia ? yo creo que no serían lo mismo no? Mañana Mlg Paralizá con el Cautivo! :D
Hola Ana,
Los siento mucho pero no. Con Stevia no te van a ayudar igual porque el azúcar además de endulzar también da textura. Habría que probar la receta para ver cómo hay que modificar la cantidad de harina, y no lo he hecho nunca, así que lo siento mucho pero no puedo ayudarte en esto. Un abrazo
Hola! Tienen tal pintaza en tus fotos que me voy a poner manos a la obra y hacerlas. Quería preguntarte: para tenerlas frescas para un día concreto, se puede congelar la masa, la rosquilla ya hecha o el almíbar ya la conserva unos días?
Gracias!
Hola Susana, puedes congelarlas ya hechas, pero el almíbar las dejará jugosas un par de días. Nunca las he tenido más días porque se acaban enseguida (aunque los esconda, los duendecillos dan con ellos), pero ya fritos los puedes congelar antes de ponerles el almíbar. Luego descongelas y pones el almíbar. Un beso grande
Gracias! Las hice antes de leer tu respuesta y ya se han acabado, así que esta semana volveré a hacerlas.
Lo primero, muchas gracias por la receta, el sabor es bueno buenísimo, pero tengo que repetirlas para corregir errores.
El primero es que tengo la sospecha de que no he trabajado bien la masa: usé varillas de amasar en una batidora eléctrica porque aquello era como meter la mano en arenas movedizas. Después de un ratín me parecía que ya estaba porque la masa se estaba poniendo muy difícil (a las varillas les costaba moverse), y cuando la saqué del bol era como alquitrán de las carreteras, aquello no había forma humana de hacer una bola; lo puse como pude en un film, lo envolví bien y toda la noche estuvo en la nevera. A la mañana siguiente con el frío se manejaba mejor y pude hacer las rosquillas. No daba un duro por ellas, pero ya te digo que estaban súper ricas, así que una sorpresa agradable.
Para la próxima: crees que hay que amasar más?
También tengo dos dudas más: usé harina de fuerza 220w, mejor la de repostería, no?
Y por último, recién hechas estaban espectaculares, crujientitas por fuera y tiernas por dentro, pero en unas horas se pusieron (a pesar de estar en bote hermético) muy blandas todas ellas, especialmente las que bañé en almíbar, como un donut. Es ese el resultado final de las tuyas también en cuanto a textura?
Muchas gracias y enhorabuena por la receta, una vez que consiga pulirla será de 10!!!
Hola Susana! Como me alegro que te hayan gustado pero como dices hay que perfeccionarlas.
Por un lado importante que uses harina de repostería. La harina de fuerza es más seca y es posible que por eso te costara amasarlas. Pesa bien los ingredientes y usa huevos talla L. Si usas batidora eléctrica, pon el accesorio de amasado no con varillas y sigue los pasos de mezclado. Finalmente no pongas todo el almíbar. Es más, puedes ponerlo solo a las to aquellas que vayas a consumir y al día siguiente cuando vayas a tomar el resto vuelves a calentar el almíbar y se lo pones. A mí me quedaron perfectas pero puede ser que el almíbar sea demasiado así que báñalas un poco y nada más. Si te sobra lo guardas para otra cosa (un bizcocho que al cabo de los días se te haya quedado auto o algo así) un beso grabde y ya me contarás. Por cierto, gracias a ti por estar por aquí conmigo guapísima
Hola! Me encantan tus recetas, pero tengo problemas con esta masa, ayer la hice con la mitad de ingredientes y quedo líquida y hoy la hice con todos los ingredientes y salió líquida. He pesado todos los ingredientes y no sé en dónde está el fallo. Con la masa de ayer le incorporé más harina para intentar salvar la masa pero nada, la dejé reposar toda la noche en la nevera se hizo un poco más manejable pero no quedó nada bien. Sabrías decirme dónde está el fallo ? Mil gracias !!!
Hola Yessica, pues me lo pones muy difícil pero ahora que he repasado la receta tengo una pregunta: no habrás añadido el almíbar a la masa ¿verdad? He hecho una modificación separando los ingredientes de los roscos del resto de ingredientes que se usan para terminarlos una vez están fritos, no vaya a ser que eso te haya confundido. Si es así, lo siento muchísimo de verdad. Pero a priori parece un tema quizás del tamaño de los huevos. Así que haz una prueba: haz la masa solo con dos huevos. Si ves que la consistencia es buena fríelos que de sabor estarán igualmente buenos. Si ves que queda un poco dura, añade solo uno. Por favor cuéntame qué tal te salen. Otra de las seguidoras tuvo problemas con la receta porque le salían muy duras, pero luego las repitió y le salieron bien. Espero que a ti te pase igual y te salgan ricas ricas. Ya me contarás uy de nuevo disculpas si ha sido un problema de la interpretación de la receta por no estar bien redactada. Gracias por escribir y por estar por aquí conmigo :)
Buenos días Loleta. En primer lugar quiero felicitarte por tu blog. Tus recetas son espectaculares!!! Enhorabuena por tu trabajo. Acabo de hacer la masa de los roscos y tengo una duda. Con los 58 gr de harina la masa me queda líquida y me es imposible formar una bola. Me podrías indicar dónde está mi error. Mil gracias y sigue así!!!
Mil perdones Susana. NO son 58 g son 580 g. Ya está corregido. UN abrazo y gracias