Ya sabéis que Londres es una ciudad que me encanta y a la que necesito volver periódicamente… ya estoy planeando mi próximo viaje. Son muchos los mercados que tiene Londres, pero este Borough Market (también llamado mercado de Southwark) es único y singular por muchos motivos. Si estas planificando una escapada a la capital británica en los próximos puentes, no dejes de visitarlo. Más que recomendable, sobre todo para foodies y cocinillas. La mejor forma de llegar es en metro, la estación ideal para ir a este escaparate gastronómico, es la de London Bridge, que además se encuentra a tan solo unos metros.

Para empezar os diré que es el mercado de alimentación más antiguo de Londres y sin duda el mejor y más famoso de todos los mercados de la ciudad. Está situado bajo las vías del tren justo en la parte sur del más que conocido puente de Londres. Comenzó su andadura en el siglo XI, y a su ubicación actual (Borough High Street) se trasladó en el siglo XIII, de hecho, se encuentran celebrando sus 1.000 años de existencia.

Es que es el lugar que los agricultores del sur de Inglaterra eligieron para vender sus productos a la entrada de la ciudad. En 1.755 se cerró por el parlamento, pero un grupo de vecinos de Southwark adquirieron las tierras junto a la iglesia de St Margaret’s, y lo abrieron de nuevo al año siguiente como hoy lo conocemos. Incluso posee el distintivo «Blue plaque» del English Heritage, como edificio histórico.

Fue tomando auge y todo fue perfecto hasta que surgen los supermercados y los londinenses deciden que prefieren comprar en grandes superficies, en las que pueden encontrar todos los productos de la compra. De este modo, Borough se convierte en un mercado de productos gourmet: renovarse o morir y decide ofrecer todo aquello que no puedes encontrar en un supermercado: productos muy frescos de una calidad altísima tanto de Gran Bretaña, como del resto del mundo. De hecho cuando llegas, además del bullicio (siempre está atestado de gente), te da la ansiedad de verlo todo y no perderte nada.

El mercado se levanta bajo una estructura metálica que por sí sola ya merece la pena la visita, y está plagado de puestos donde venden todo lo que puedas imaginar, y me atrevería a decir que lo que no puedas imaginar lo venden también. Se divide en distintas zonas diferenciadas de vegetales, pescados, carnes, embutidos, vinos, queso, trufa, etc. y todo tipo de productos, así como una extensa zona donde se puede disfrutar de un verdadero street food muy internacional

Podemos además hacer un recorrido geográfico a través de Europa, porque hay puestos italianos, franceses, españoles… que aportan al mercado una gran variedad de sabores y de cocinas distintas y donde poder exhibir los mejores productos de cada país. Es caro eso sí, pero es como una tienda gourmet gigante donde a mi siempre me apetece traérmelo todo.

Son espectaculares los puestos de frutas de todos los colores. Algunos puestos las ordenan por familias y otros por colores de modo que verlos es ya todo un espectáculo. Siempre me he preguntado porqué en España no cuidan así los puestos en la mayoría de puestos de mercados, cuando tenemos la mejor fruta y verdura de toda Europa.

Pero aquí no se acaba todo. Borough cuenta además con un Street Food Market genial. Un sin fin de restaurantes y puestos callejeros harán que no te quieras ir nunca de este roncón alejado del centro de la ciudad. Podrás tomar pescado, marisco, ostras, queso, comprar cacao o tomarte una tapa española en las cercanías del mercado, además de por supuesto las clásicas salchichas inglesas (se me hace la boca agua). ¡Qué ganas de volver otra vez!

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