Uno de mis parques favoritos en Londres es, como no, Hyde Park. Enorme cuando se ve en los mapas, e inmenso cuando se recorre, es considerado el pulmón de Londres (como El Retiro en Madrid o Central Park en Nueva York) y a la vez, uno de los más bellos del mundo, tiene una gran historia.
Me quedo con un rincón tranquilo y familiar: «Diana, Princess of Wales Memorial Playground», ubicado en la esquina de acceso por la parada de Queensway, en Kensigton Garden.
Con una gran zona de recreo infantil, un enorme barco pirata marca el centro de este memorial en honor de la princesa Diana de Gales. Este coqueto parque dentro de Hyde Park se abrió el 30 de Junio de 2.000
Situado cerquita del Palacio de Kensington en el que la Princesa residía, el parque honra la memoria de Lady Di que siempre estuvo muy identificada con la infancia.
Más de 750.000 niños visitan cada año este parque en el que juegan, exploran y dan rienda suelta a su imaginación. Un oasis para ellos en el que no faltan playas de arena, esculturas, árboles y plantas. Hay además un montón de bancos (al sol y a la sombra) donde los padres se sientan mientras los niños juguetean por todos lados.
En este parque inspirado en Peter Pan, los niños disfrutan de lo lindo por su tamaño y juegos. Además, cuenta con lugares de avituallamiento: dulces y sandwiches, baños completos y cambiadores para bebés. Un lugar ideal para alternar el shopping cuando se viaja con niños pequeños a la capital británica.
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