Zahara de los Atunes es dede hace más de 13 años mi imagen en familia, relajada y disfrutando del verano en la playa de Atlanterra. Es por muchas razones mi paraíso, pero sobre todo es un paraíso de naturaleza, playas increíbles y de una gastronomía para recordar siempre.

Cádiz representa el amor al mar, y Zahara de los Atunes es el reino del atún. El ronqueo (despiece tradicional del atún donde se respetan todas sus piezas) y la variedad de cortes de atún que podéis encontrar en esta zona es de las más amplias del mundo. Sus atunes de almadraba (arte ancestral de pesca de la época fenicia, compuesto por un laberinto de redes, que se instala aprovechando el paso de los ejemplares del Atlántico al Mediterráneo desde Abril a Junio) son comprados por ávidos restauradores japoneses que directamente congelan y trasladan estos atunes tan apreciados en su gastronomía. Pero además del atún, Cádiz es la cuna de los langostinos de Sanlúcar (espérame que voy), de las almejas y de las tortillitas de camarones entre otros. En Zahara de los Atunes hay varias opciones de restaurantes, así que os daré algunas de mis recomendaciones.

Casa Juanito es un clásico entre los clásicos. Como en cualquier otro restaurante del pueblo encontraréis, en época de almadraba, distintos cortes del atún en todas sus versiones: morrillo, mormo, solomillo, tarantelo, ventresca, etc. a la plancha, en tataki, encebollado, etc., Las almejas están deliciosas y las tortillitas de camarones sublimes. Tiene una terraza súper agradable, pero no admite reservas. Solo podéis apuntaros en la «lista de espera». Llegáis al restaurante a la hora establecida y esperaréis solo un poco, pero si no os apuntáis en la lista, ¡¡os quedaréis sin cenar!! Sin duda mi favorito de Zahara de los Atunes.

Otro de nuestros favoritos es Ramón Pipi (escrito con el símbolo matemático del número Pi al cuadrado… ¡qué arte!). Con una magnífica terraza, aquí no podéis dejar de tomar el pulpo a la escandalera. Como su nombre indica un escándalo de pulpo, sobre unas patatas machacadas y cubierto con una salsa mahonesa especiada secreta. Una delicia, pero igual que Casa Juanito, cualquier variedad de atún, almejas o revueltos del mar, harán vuestras delicias.

Además, si vuestro bolsillo es ancho, no podéis dejar de ir al restaurante del Hotel Antonio, donde el pescado es una religión. Los pescados a la sal, y los mariscos son su especialidad. Si no habéis probado nunca las ortiguilas fritas, debéis pedirlas para saber lo que es un pedazo de mar en vuestra boca, os seguro que habrá merecido la pena.

Hace poco (solo un par de años), se ha instalado en la zona La Taberna del Campero, sucursal en Zahara del afamado Campero de Barbate, cuna del sashimi más natural que podréis probar en la zona y con una materia prima de lo mejor de España. Bien decorado con reseñas marineras, ofrece una buena carta de tapeo y se ha convertido en una referencia en el pueblo.

Estos son mis tres sitios favoritos aunque hay otros muchos que siempre es un placer visitar y descubrir. Un gusto de lugar de donde siempre vuelvo con unos kilos de más, pero ¿y si no, dónde?

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